La Agrupación Provincial en Burgos de TIERRA COMUNERA (TC) al cumplirse tres años de la toma de posesión de Juan Carlos Aparicio como alcalde de Burgos, quiere manifestar ante la opinión pública burgalesa su rechazo al modelo urbanístico que desarrolla el equipo de gobierno del PP en el consistorio burgalés, al tiempo que propone un crecimiento urbano más sostenible para la ciudad de Burgos y sus vecinos.
Luis Marcos, secretario general de esta formación castellanista criticó especialmente las pretensiones del equipo de gobierno popular de recalificar nuevos sectores urbanísticos, como las previsiones del MasterPlan, los dos nuevos sectores de la Zona Sur y el nuevo sector urbanizable de Villalonquéjar, que en su totalidad incluyen casi 20.000 nuevas viviendas. A juicio de TIERRA COMUNERA (TC), estas recalificaciones suponen una alteración tan intensa y extensa del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de 1999, del que aún están previstas o en ejecución más de 15.000 viviendas, que se haría imprescindible tramitar estos nuevos proyectos como una Revisión del PGOU actual y no como una mera modificación puntual.
TIERRA COMUNERA (TC) reclama un giro radical en las actuaciones urbanísticas del equipo de Aparicio, especialmente en lo que se refiere a la realización de un nuevo Plan General de Ordenación Urbana para la ciudad de Burgos, que canalice las aspiraciones de participación y de información que la ciudadanía reclama, y que apueste con decisión por un modelo de ciudad basada en la sostenibilidad y en criterios de calidad en su habitabilidad. En este sentido, los comuneros reclaman incrementar el espacio libre a disfrutar por los vecinos, dotando una gran reserva de suelo (en torno a 200 hectáreas) al Sur del Eje Cívico, conformando el Gran Parque Suroeste de la ciudad, y el Gran Parque Noreste que se extendería en una superficie de 350 hectáreas al Norte de la Estación del Ave, en el triángulo formado entre la Carretera de Santander, el Desvío del Ferrocarril y la ronda Norte de la ciudad, creando dos nuevos grandes pulmones verdes para los burgaleses, que en los últimos veinte años, han visto crecer en más de un 40% suelo urbanizado, pero que siguen disfrutando de los mismos espacios verdes de antaño (incluso más recortados y acosados) como Fuentes Blancas, El Castillo, La Quinta, la Isla o El Parral.
Del mismo modo, los castellanistas califican como pésima la gestión de Aparicio en dos aspectos tan claves para el futuro de la ciudad como la generación y gestión de nuevo suelo industrial, o el diseño de sistemas de comunicación vial que mejoren la caótica situación del tráfico en la ciudad.
Igualmente, Marcos citó la urgencia de coordinar el crecimiento urbanístico de Burgos con las previsiones de incrementos residenciales en las localidades del Alfoz de Burgos, que alcanzan la cifra de 40.000 nuevas viviendas, algo clave en temas como las dotaciones de servicios y en lo que se refiere a la movilidad.