Los castellanistas burgaleses proponen, como instrumentos para incrementar la recogida selectiva de residuos reciclables, implicar a la ciudadanía y los colectivos sociales, garantizando que el 100% del dinero obtenido de la valorización de los residuos de la recogida selectiva se destine a actuaciones concretas de mejora en los barrios, y que estas inversiones sean elegidas y priorizadas por los propios vecinos a través de su tejido asociativo. Los responsables del PARTIDO CASTELLANO (PCAS) también proponen implantar el cuarto contenedor, para la recogida exclusivamente de materia orgánica, destinada a la obtención de compost de alta calidad. Todo ello redundaría según las estimaciones del PCAS en incrementar los retornos económicos hasta una cifra superior a los 2.000.000 euros anuales, mejorando la calidad ambiental, reduciendo rechazos destinados a vertederos y su contaminación, incrementando la sensibilidad ecológica de la población y fortaleciendo el músculo asociativo en los barrios y las prácticas de democracia directa y participativa. Esa cantidad de 2.000.000 euros, supondría que para muchos barrios de Burgos las inversiones por retornos de la recogida selectiva sería mayor a la que habitualmente les dedica el consistorio burgalés, y la elección por parte de los propios vecinos de la prioridad de las intervenciones (arreglo de calles, mobiliario urbano, parques infantiles, iniciativas sociales, programación cultural, adecentamiento de rincones insalubles, creación de jardines, repoblaciones, etc…) garantizaría el fortalecimiento del tejido ciudadano y vecinal, y el diseño de prácticas democráticas participativas en los barrios.
Desde el PARTIDO CASTELLANO (PCAS) se afirma que el objetivo debe ser situar la tasa de reciclaje pasando del actual 17% en un 25% para vidrio, papel, cartón y envases (algo razonable y que aún así estaría por debajo de la mayor parte de los ayuntamientos próximos de las Comunidades del País Vasco y Navarra). Si a ello se añade una recogida de residuos orgánicos fermentables en contenedor marrón que implicara la producción de unas 10.000 toneladas de compost de alta calidad (de las 70.000 toneladas de residuos genéricos que se recogen actualmente al año), la implementación de todas estas medidas supondrían que los retornos económicos anuales por la recogida selectiva ciudadana serían de en torno a los dos millones de euros anuales (en 2013 fueron de 1.152.000 euros), a aplicar directamente en necesidades de los barrios.
Desde el PARTIDO CASTELLANO (PCAS) se considera que con todas estas medidas pueden incrementar la recogida de vidrio hasta los 5 millones de kilogramos anuales, hasta 8 millones de kilogramos anuales la recogida de papel y cartón y hasta los 4 millones de kilogramos la recogida anual de envases del contenedor amarillo.