TIERRA COMUNERA-ACAL EN VALLADOLID PIDE QUE SE ACOMETA CON CARÁCTER DE URGENCIA LA AMPLIACIÓN DEL CLÍNICO. (Abril’2007). .. (27/06/2007)

El candidato a la alcaldía por Tierra Comunera – ACAL, Eduardo Rodríguez, ha pedido formalmente al Ayuntamiento de Valladolid, a la Junta de Castilla y León y a la Universidad de Valladolid que den la máxima celeridad posible a la tramitación de las gestiones correspondientes a las obras de ampliación del Hospital Clínico Universitario de Valladolid, en cuya ejecución intervienen las tres partes. Eduardo Rodríguez ha manifestado su preocupación porque el proyecto lleve parado desde 2005. Tierra Comunera – ACAL pedirá a las tres administraciones implicadas en las obras de ampliación del Clínico, que actúen con la máxima celeridad posible, para que el acuerdo al que llegaron hace ya dos años se haga efectivo lo antes posible y se produzca la necesaria ampliación del centro hospitalario de referencia en Valladolid. Para el candidato a la Alcaldía, resulta “sonrojante” que habiendo un acuerdo entre las administraciones desde hace tanto tiempo, no se haya avanzado nada en este importante proyecto. El candidato de Tierra Comunera – ACAL considera que el estado actual del Hospital Clínico es “muy preocupante” y que la saturación y la falta de espacio en las instalaciones están provocando un empeoramiento en el servicio ofrecido por los sanitarios, “lo que implica a su vez el malestar de los cientos de usuarios del hospital”. Tierra Comunera – ACAL manifiesta su total preocupación por el estado del servicio de urgencias del Hospital, en el que los pacientes han de esperar frecuentemente más de 3 horas para ser atendidos. Eduardo Rodríguez ha denunciado también que no se cuenta con salas de espera lo suficientemente grandes para satisfacer la demanda actual del servicio de Urgencias, lo que provoca que algunos enfermos y acompañantes hayan de esperar de pie durante horas a que sean atendidos. La misma situación se repite con las salas de intervención y consulta, donde la falta de espacios adecuados provoca que los pacientes tengan que compartir “cortina” con otros enfermos o en el peor de los casos, ser ubicados en los pasillos del servicio de urgencias.