La Junta firma un convenio con las Cámaras de Comercio y Caja España para recuperar fábricas e industrias de especial interés para Castilla y León
Un inventario permitirá catalogar a lo largo de dos años los bienes ubicados en Castilla y León que sean susceptibles de ser considerados patrimonio industrial así como estudiar su estado de conservación y las alternativas que presentan con vistas a su posible recuperación.
El inventario, que es una de las principales acciones que recoge el convenio de colaboración firmado ayer entre la Consejería de Cultura y Turismo, Caja España y el Consejo Regional de Cámaras de Comercio de Castilla y León, permitirá identificar todos estos bienes para, posteriormente, recogerlos en una publicación, el Libro Blanco del Patrimonio Industrial de Castilla y León.
Así lo puso ayer de manifiesto la consejera de Cultura, Silvia Clemente, quien recordó que este trabajo, que se engloba en el Plan de Protección del Patrimonio Histórico de Castilla y León 2004-2012 (PAHIS) y que cuenta con un presupuesto de 350.000 euros -250.000 aportados por la Consejería y 100.000 por Caja España-, busca identificar un patrimonio «moderno y novedoso que no ha tenido la consideración» del patrimonio clásico con que cuenta la Comunidad, según informa Europa Press.
De este modo en primer lugar se realizará la catalogación, que prestará «especial atención» a las comarcas mineras de la Comunidad -en León se fabricó la primera locomotora industrial, según explicó la consejera- y se elaborará el Libro Blanco, aunque uno de los principales objetivos es recuperar las infraestructuras ligadas a los «sectores pujantes» de la Comunidad.
En este sentido, Clemente valoró la participación en el convenio del Consejo Regional de Cámaras de Comercio dado que, en su opinión, su presencia en el acuerdo permitirá llegar al tejido empresarial así como concienciar y acercar las actuaciones a los propios empresarios, propietarios en muchos casos de estos bienes.
Este patrimonio abarca desde fábricas de harinas como las que se ubican en Tierra de Campos, como la industria textil de la zona de Béjar (Salamanca), la propia Casa de la Moneda de Segovia o el mismo Canal de Castilla, que ya ha recibido junto a Sabero inversiones para la puesta en marcha de actuaciones.
Clemente recalcó que el hecho de que gran parte de los bienes patrimoniales sean de titularidad privada determinará la puesta en marcha de medidas para su recuperación y puesta en valor, mientras que en el caso de los de titularidad pública se podrá decidir sobre su uso futuro y las posibilidades de inversión por parte de la Administración.