La Agrupación Provincial en Toledo de TIERRA COMUNERA (TC), ante la autorización el pasado jueves 13 de Enero de 2.005 de un nuevo Trasvase de 114
hectómetros cúbicos de agua del río Tajo al Segura, quiere expresar su más firme rechazo a esta decisión de la Comisión Central de Explotación del Acueducto Tajo-Segura e instar nueva y enérgicamente a las Administraciones Públicas implicadas a que paralicen definitivamente el Trasvase Tajo-Segura, que supone una auténtica sangría para el río Tajo y para todas las tierras que este río atraviesa.
Desde TIERRA COMUNERA (TC) nos parece indignante la actitud del Gobierno de Castilla-La Mancha que es incapaz de dar pasos firmes y claros para la paralización de este Trasvase, como se dieron desde el Gobierno de Aragón y de Cataluña para lograr paralizar en su día el Trasvase del Ebro. Es evidente que el PSOE de Castilla-La Mancha utiliza el tema del Trasvase de forma interesada, ya que mientras de cara a la opinión pública se muestra contrario a la continuidad del Trasvase, de cara al Gobierno de España (también del PSOE) es incapaz de presionar lo suficiente para lograr esa paralización, cosa que no ha hecho en los más de veinte años que lleva gobernando en CLM y que es evidente que no tiene intención política de hacer ahora. En cuanto a la actitud del partido Popular en Castilla-Las Mancha, nunca han estado firmemente en contra de este Trasvase y parece que les interesan más los votos que su partido pueda conseguir en la Comunidad de Valencia o de Murcia que luchar por conseguir el bienestar de los castellanos del sur, que somos quienes al fin y al cabo les estamos pagando sus sueldos en el Parlamento autonómico.
El partido castellanista TIERRA COMUNERA (TC) quiere aprovechar este comunicado para hacer un llamamiento a toda la opinión pública sobre el grave problema de agua potable que sufren las poblaciones de Castilla-La Mancha mientras cientos de hectómetros cúbicos cruzan anualmente nuestras tierras en dirección a las huertas intensivas, a los campos de golf, a las urbanizaciones de lujo y a los complejos turísticos (esto es, a generar riqueza en esas tierras), mientras sólo una pequeña parte de ese agua se destina a paliar problemas de consumo humano (en este caso un escaso 36% del agua trasvasada). Mientras tanto, muchas poblaciones castellanas deben ser abastecidas con camiones cisterna durante el verano, incluidos algunos pueblos ribereños de los grandes embalses de Entrepeñas y Buendía que no tienen acceso al agua allí embalsada ni siquiera
para paliar sus problemas de consumo humano.