A día de hoy, y según informa el Ministerio de Medio Ambiente a través de su boletín hidrológico semanal, los embalses de Entrepeñas y Buendía almacenan únicamente 254 Hm³ (10,27% de su capacidad), a sólo 14 Hm del límite «mínimo» marcado por la Ley. De ellos, la peor situación la tiene el embalse de Buendía que pese a estar por debajo del 10% de su capacidad, ha «perdido» 7 Hm³ esta última semana, encontrándose actualmente al 9,27% de su capacidad, mientras que Entrepeñas se encuentra al 12,22%, con 102 Hm³. Estas cifras suponen el nivel más bajo de los últimos años, un peligro rotundo para el abastecimiento humano del Levante y la ruina total y absoluta para toda la comarca que vive de los embalses, muchos de cuyos pueblos llevan semanas abasteciéndose de camiones cisterna mientras ven continuamente circular agua del Tajo por el canal del Trasvase, con destino a Levante.
Para TIERRA COMUNERA (TC) es dramático, indignante y vergonzoso que se haya llegado a esta situación, responsabilidad tanto del PSOE como del PP, que en su años de Gobierno (unos en Castilla-LM y en España y en el Gobierno de España los otros) no han hecho absolutamente nada para terminar con este expolio hídrico que empobrece la comarca donde se sitúan los embalses de Entrepeñas y Buendía y hace que el río Tajo «circule» (si se puede decir así) semi-seco a lo largo de gran parte de su cauce. Basta con asomarse a cualquiera de los puentes de Toledo para comprobar cómo el otrora ensalzado por lo poetas río Tajo, es ahora sólo una sucia cloaca que ni siquiera tiene caudal suficiente para «correr» alrededor de la ciudad castellana.
Desde TIERRA COMUNERA (TC) exigimos tanto al Gobierno de España como al de Castilla-La Mancha (que tiene competencias medioambientales sobre el río Tajo que jamás ha cumplido) soluciones reales, rápidas y eficaces para terminar de una vez por todas con la agonía que sufre el río Tajo, especialmente en los casi secos embalses de cabecera y en toda la zona del Tajo Medio, donde por desgracia algunos han puesto sus ojos para un nuevo Trasvase a Levante.
Es necesario elevar el caudal ecológico del río a su paso por Aranjuez, Toledo y Talavera y hacer, con la fuerza de la Ley y la presión política necesaria, que ese caudal se cumple permanentemente. Es necesario elevar la reserva mínima en los embalses de cabecera, de forma que se permita el desarrollo de los pueblos de alrededor de los mismos, empezando por la medidas necesarias para asegurar el suministro de agua a unos pueblos que no pueden «tocar» el agua de los embalses, pese a ser quienes «sufren» directamente su ubicación. Y, por último, es necesario un pronunciamiento claro y conciso de todos los representantes políticos en contra tanto del Trasvase Tajo-Segura como del probable nuevo Trasvase del Tajo Medio. Y, sobre todo, son necesarios hechos y no palabras. Llevamos demasiados años oyendo promesas que nunca se materializan.