La Agrupación Provincial en Burgos de la formación castellanista TIERRA COMUNERA (TC) lamenta que los informes de Patrimonio y Cultura que tanto la Junta de Castilla y León como el Ministerio de Cultura estaban realizando sobre el impacto de la Pista de Hielo en el Monasterio de San Juan, no hayan sido concluidos cuando la citada actividad recreativa ya ha finalizado. En opinión de este partido castellano, esta realidad evidencia la inoperancia administrativa de ambas instituciones, ya que los resultados que se evacuen de los citados informes serán plenamente inoperantes e inútiles al haber concluido la actividad potencialmente perturbadora.
TIERRA COMUNERA (TC) recuerda que a primeros de diciembre pasado remitió a la Junta de Castilla y León y a la Subdelegación del Gobierno escritos advirtiendo de los posibles efectos negativos que sobre el Monasterio de San Juan tendría la instalación de una pista de hielo, y que llevaron a ambas instituciones a dar algunos pasos; así desde el Área de Patrimonio de la Delegación Territorial se anunció que se dirigirían al Ayuntamiento de Burgos para solicitar un informe de la actividad a realizar y lo que esta implica, al ubicarse sobre un bien de Interés Cultural (BIC); estos informes no han llegado a realizarse por parte del Consistorio Burgalés. Por su parte, la Subdelegación del Gobierno remitió el escrito de la formación castellanista al Ministerio de Cultura, como propietario del inmueble, para su evaluación, sin que hasta el momento haya habido respuesta.
Las acciones emprendidas por TIERRA COMUNERA (TC) se basan en las tesis mantenidas por los servicios de Patrimonio del Gobierno Regional, que afirman que todas las actividades a desarrollar en un Bien de Interés Cultural, como el Monasterio de San Juan deberían pasar su sección al objeto de conocer cualquier actuación prevista. TIERRA COMUNERA (TC) reclamará un informe de los efectos de la actividad realizada las pasadas Navidades en este emblemático Monumento burgalés.
Los castellanistas denunciaron en su momento que el Monasterio de San Juan no es el lugar idóneo para la ubicación de la pista de hielo. Esa instalación, contaba con iluminación nocturna, gradas para 100 personas, cafetería y música ambiental, y estas actividades implicaron el movimiento de maquinaria pesada en el interior del recinto y la instalación de equipos industriales de gran volumen e impacto, lo que potencialmente podía incidir de forma muy negativa en el mantenimiento del Monasterio.
El partido castellanista recuerda que el año 2005 la colocación de la pista de hielo en ese espacio provocó importantes desperfectos en el pavimento, suciedad sobre el suelo y los muros, agresiones del hielo y el agua, falta de seguridad y riesgos para los usuarios y el patrimonio. Los comuneros consideraron sorprendente que el expediente municipal de la pista de hielo no incluyera informes sobre el impacto de esta actividad.
