El PARTIDO CASTELLANO (PCAS-Burgos) denuncia ante la opinión pública y los medios de comunicación que el Ayuntamiento de Burgos, a través de la Empresa Municipal «Aguas de Burgos» suministró a la población burgalesa «agua no potable» a la población, sin proceder a comunicar dicha circunstancia a la ciudadanía y sin realizar la correspondiente alerta de incidencia en la calidad del suministro.
Los castellanistas burgaleses denuncian que durante el fin de semana pasado, y muy especialmente, durante la mayor parte del domingo 10 de Diciembre, el Agua que suministró el Ayuntamiento de Burgos a la mayor parte de los barrios de la ciudad, no cumplía los requisitos establecidos en el vigente Real Decreto 140/2003 de 7 de febrero que describe los Criterios Sanitarios de Calidad de las Aguas de Consumo Humano. Desde el PARTIDO CASTELLANO (PCAS) se informa que la legislación vigente exige que las aguas de suministro para consumo humano tengan una Turbidez máxima de 1,0 (medida en unidades UNF), mientras que durante el incidente producido el fin de semana del 9-10 de Febrero, la mayor parte de los grifos de la ciudad suministraban un agua que superaba ampliamente el doble de esta cifra (cuando los valores habituales que suministra Aguas de Burgos en su red se sitúan en 0,3 UNF.
Las actuaciones del Servicio de Rescate del Grupo de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil en el Embalse de Úzquiza el pasado fin de semana, obligaron a suspender la captación de agua en dicha infraestructura y provocaron que el descenso de la cantidad de agua almacenada en algunos de los depósitos que abastecen la ciudad obligara a trasvasar agua entre varios de estos depósitos, suministrando a la población agua con cierta proporción de sedimentos del fondo de los depósitos y turbidez adicional generada por la agitación que provocó la transferencia de las masas de agua de los citados depósitos.
Desde el PARTIDO CASTELLANO (PCAS) no se quiere crear un alarmismo infundado, ya que aclara que, en principio, el que el Agua de Consumo no cumpla puntualmente todos los requisitos legales de potabilidad, no presupone efectos perjudiciales a la salud de la población. Igualmente, este hecho accidental no prejuzga la reconocida capacidad técnica de los profesionales de Aguas de Burgos, aunque puede sugerir una limpieza más frecuente de los depósitos de almacenamiento, o comenzar los fines de semana con los depósitos al 100% de su capacidad.
Sin embargo, desde el PARTIDO CASTELLANO (PCAS) se reprueba absolutamente el comportamiento de los responsables políticos del suministro de agua potable a la ciudad, Carolina Blasco y Javier Lacalle, que han secuestrado información clave a los ciudadanos burgaleses, que tienen todo el derecho a conocer en todo momento la calidad de las aguas que se les suministra, y decidir por sí mismos, si quieren beberla o no, aunque no cumpla todos los requisitos sanitarios de calidad que exige la legislación.
Nuevamente el Ayuntamiento de Burgos que gobierna el PP, en lugar de cumplir la legislación que le obliga a informar a los consumidores del deterioro de la calidad del agua que suministra, o incluso a recomendar el no consumo de dicha agua, opta por tratar a los ciudadanos y a los medios de comunicación como súbditos menores de edad, en lugar de cómo ciudadanos adultos y responsables que tienen derecho a conocer todas las incidencias que afectan al suministro del agua, que religiosamente pagan.
http://