Aranda de Duero (Burgos) acoge el domingo 28, el concejo Nacional de Tierra Comunera (TC) que avanzará en el proyecto de refundación del castellanismo político. (Septiembre 2008). . (26/09/2008)

El Concejo Nacional de la formación castellanista TIERRA COMUNERA (TC), máximo órgano entre congresos de este partido, se reunirá en la mañana del domingo 28 de Septiembre en la localidad ribereña de Aranda de Duero (Burgos), presidido por su Presidente Nacional, Manuel Soriano, y por su Secretario Nacional, José Ignacio Delgado, y que incluye a cerca de cuarenta dirigentes territoriales de esta formación comunera, se reunirá en la sede arandina de esta formación comunera, a partir de las 10:00 horas de la mañana, y analizará los resultados del proceso de refundación del castellanismo político que TIERRA COMUNERA (TC) está impulsando desde la celebración de su VIII Congreso Nacional, en octubre pasado, como novedosa estrategia política orientada a la creación de un proyecto político amplio en Castilla, que genere una alternativa real al bipartidismo, sumando esfuerzos de diferentes formaciones políticas de ámbito castellano, y que obtenga representación en las grandes instituciones políticas en los comicios municipales y autonómicos de 2011, proceso que avanza satisfactoriamente, al haberse interesado por el mismo de forma positiva ya seis formaciones políticas.

 

La refundación del castellanismo político va a implicar la creación de una nueva formación política castellanista, mediante la convergencia de una docena de partidos, candidaturas y agrupaciones políticas independientes, regionalistas, provincialistas y comarcalistas castellanas, que cristalizará en un Congreso fundacional que se realizará en los próximos meses, y que apostará por un modelo de partido nuevo, abierto a la sociedad, fuertemente ético, que integré la participación ciudadana y la lucha contra la corrupción política como eje de referencia en su acción, y que reivindique el papel de Castilla como territorio con un futuro común y de progreso, basado en la comarcalización, la reivindicación de nuevas infraestructuras, la puesta en valor de su patrimonio cultural, natural y lingüístico, y la ruptura del bipartidismo esterilizante, empobrecedor, sucursalista y centralista del PP y del PSOE.