Asimismo, pedimos la destitución de la alcaldesa de Paredes, Montserrat Infante, como Diputada Provincial, por respaldar las palabras impresentables de su edil por unas «presuntas disculpas» que no hacen más que ahondar en la miseria moral de este personaje.
Actos como éstos reafirman a los miembros del Partido Castellano (PCAS) en la necesidad de expulsar a estos auténticos caciques de nuestras instituciones. Más les valdría a gente como Infante y como Cabeza ocuparse de los problemas de su localidad, que ha perdido un tercio de su población durante los últimos 30 años, pasando de 3.000 a 2.000 habitantes, en vez de dedicarse a amenazar a los discrepantes con su régimen caciquil.