Tanto los responsables de UPyD como los de Ciutadans han defendido desde hace años, e incluido en sus programas tal y como figura en las posiciones más relevantes de sus webs “la eliminación de todos los Ayuntamientos de menos de 5.000 habitantes”, la fusión de municipios como presunta medida de “modernización de la administración”, en la misma línea que subyacía en la Ley de Modernización y Sostenibilidad de la Administración Local del PP, aprobada en diciembre de 2013, y que finalmente excluyó, ante la presión de las instituciones locales, una de sus más contestadas propuestas: la “fusión obligatoria de pequeños municipios”. Ahora las declaraciones de los principales líderes de estas formaciones, Rosa Díez y Albert Rivera, insisten en la misma idea, apostando por suprimir todos los municipios de menos de 5.000 habitantes, dejando los 8.112 municipios españoles en un número que va de 900 a 1400.
Sin embargo ante el revuelo ocasionado por estas propuestas de los partidos “mata-pueblos” los responsables de Ciutadans en la Ribera del Duero, y en contra de lo que expresa oficialmente su partido a nivel nacional, han pretendido “suavizar” su descabellada propuesta de reorganización municipal sugiriendo una fusión de municipios en la Ribera, que dejaría en solo cinco los ayuntamientos en la Comarca, y que supondría suprimir, ni más ni menos, que 60 Ayuntamientos.
Las consecuencias de suprimir la práctica totalidad de los Ayuntamientos existentes de la Ribera del Duero, no supondría ningún ahorro, pues la mayor parte de sus cargos públicos (alcaldes, alcaldes pedáneos, concejales y vocales en juntas vecinales) no perciben remuneración alguna, sino que impulsaría un notable encarecimiento en la prestación de los servicios básicos a la población rural, diseminada, aislada y envejecida, ya que habrían de ser prestados desde la lejanía y el desconocimiento, generaría un deterioro de la calidad de los servicios públicos, notables recortes en los mismos fruto de su encarecimiento, y una privatización a medio plazo. Todo ello supondría, por tanto, un impulso a los procesos despobladores en el medio rural y de éxodo de sus gentes a las ciudades, con el consiguiente deterioro del patrimonio cultural, monumental, natural, ambiental y de las infraestructuras de los pueblos.
Para El PARTIDO CASTELLANO “ TIERRA COMUNERA (PCAS-TC) resulta un sarcasmo que partidos como UPyD o Ciutadans, una de cuyas principales propuestas electorales es la desaparición de los pequeños municipios, presente candidaturas en los mismos, por ello, los castellanistas reclaman de todos aquellos defensores de un Medio Rural Castellano Vivo un BOICOT ACTIVO que impida que partidos anti-municipios y mata-pueblos engañen a la vecindad de municipios y pedanías, para conseguir votos que finalmente se utilizarán para suprimir sus ayuntamientos y su autonomía y democracia local.
Así mismo los responsables castellanistas se plantean actuar judicialmente contra Ciutadans y UPyD en el caso de que no informen expresamente a sus posibles candidatos a los Ayuntamientos de la Ribera del Duero, cuando firmen la aceptación de formar parte en sus candidaturas, de que su principal propuesta de organización municipal es la desaparición de los Ayuntamientos de menos de 5.000 habitantes, ya que podrían estar incurriendo en los delitos de estafa y fraude, con agravante de engaño y abuso de confianza.