La labor institucional es insustituible en la prevención y erradicación de la violencia machista. Las actuaciones de apoyo a las mujeres maltratadas como a sus hijos son, a juicio del PARTIDO CASTELLANO (PCAS-Burgos), “un pilar básico para sacar a éstas del círculo de la violencia de género”.
La dificultad que para muchas mujeres supone el acceder a servicios sociales de apoyo son parte en el descenso de las denuncias de maltrato. La mayor parte de las mujeres asesinadas en lo que va de año, y como por desgracia es habitual, no habían denunciado.
Las instituciones, en nuestro entorno, deben realizar un esfuerzo, especialmente intenso, en el mundo rural. Pequeños municipios y diputaciones precisan de criterios definidos para poder desarrollar estrategias de apoyo a la mujer, habida cuenta de que buena parte de las denuncias por violencia machista dentro de las comunidades autónomas castellanas proceden del medio rural.
PCAS denuncia el riesgo que representa el descenso drástico de las partidas destinadas a políticas de protección, prevención y seguridad de la mujer, así como a la promoción de la igualdad entre ambos sexos, que desde 2010 se han reducido drásticamente.
La violencia de género es el atentado contra los derechos humanos más extendido en todo el mundo. Las diferentes administraciones deben de garantizar que las mujeres y sus hijos, tienen un sencillo acceso a medidas preventivas y de protección, que no deben de verse afectadas por los progresivos recortes y supresión de recursos.
La violencia machista sigue incrustada en muchas vidas cotidianas en forma de malos tratos, asesinatos, violaciones, acoso sexual y múltiples discriminaciones, y ante las medidas actuales, que a pesar de los avances legislativos, de los últimos años, no han logrado atacar el mal desde la raíz. Las y los castellanistas queremos situar en el centro del debate la información y la prevención, únicas medidas capaces de superar los «parches”, y que son indispensables para proteger realmente a todas las mujeres y sus hijos de la violencia “doméstica”.
Hay que decir también que las mujeres muertas o heridas a manos de sus agresores constituyen «sólo» la cara más amarga de este escenario, pero hay mucho más que sufren.
PCAS se une a la celebración del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres del 25 de noviembre, e invita a toda la ciudadanía a sumarse a los actos reivindicativos en diferentes localidades castellanas.