Burgos perdió en 2013, 4.585 habitantes un 1,24% de su población, en 2014 otro 1,17 %, 4.348.
La provincia pierde casi 12 habitantes al día. La tercera provincia en Castilla y León que mayor porcentaje de habitantes pierde y la primera en cifras totales. Destacando especialmente el intenso éxodo juvenil, perdiendo desde 2008 más de 16.000 jóvenes entre 18 y 35 años, La pérdida de población en 2014 se ceba en la franja de 27 a 37 años.
A estas actuaciones desastrosas, en unas ocasiones, e inexistentes en otras, se suma los diferentes recortes que ha acometido el PP desde las diferentes administraciones que gobierna, y que se han cebado con el mundo rural.
La debacle se agudiza, más si cabe, en nuestros jóvenes que se planean emigrar en busca, no solo de un empleo, sino de una oportunidad para diseñar su propia vida, algo que se les niega en la tierra de sus padres. En el primer semestre de 2014 abandonaron Castilla y León 5.176 habitantes (4.198 con destino a otras comunidades y 978 al extranjero).
Un 60% de desempleo entre los menores de 30 años, los contratos precarios, la desigualdad social, la corrupción, los salarios que no llegan a final de mes, la sobrecualificación para los escasos puestos de trabajo que se ofrecen, etc… son razones de peso, que empujan a hacer la maleta. A 1 de enero de 2014 la población censada en Castilla y León quedó fijada en 2.494.790 personas, 25.085 menos que un año antes. El 1 de enero de 2009, éramos en esta comunidad 2.563.521, en el último lustro Castilla y León ha perdido 68.731 habitantes.
Esta sangría demográfica constituye sin lugar a dudas el mayor exponente del fracaso político, económico y social de esta comunidad autónoma. Desde luego fracaso sin paliativos del gobierno de Juan Vicente Herrera y un fracaso colectivo de toda la comunidad, que está asumiendo con resignación esta hecatombe. Según las previsiones del Instituto Nacional de Estadística, entre 2013 y 2023 Castilla y León está abocada a perder 195.227 habitantes.
En la primera mitad de 2014 hemos sido la segunda comunidad con peor saldo vegetativo: 14.532 defunciones y 8.951 nacimientos. La tasa de natalidad se sitúa en 7,1 nacimientos, sólo por encima de Asturias con 6,3 y lejos, de la ya de por si baja, media nacional de 9,1. Si a lo largo del pasado año perdimos 25.085 habitantes, quiere decir que hubo 15.405 que abandonaron la comunidad buscando un porvenir fuera de la misma. Castilla y León representa ahora el 5,33% de la población española, cuota que en el año 2.008 se situaba en el 5,48 % y en 1900 aportaba un 14%.
Esta pérdida de población significa además, que afrontemos aún en peores condiciones en los próximos modelos de financiación autonómica.
La comunidad tiene prácticamente el mismo número de trabajadores ocupados que de inactivos. En Castilla y León, hay un 39% trabajadores ocupados y otro tanto serían personas inactivas. 13% menores de 16 años, 9% desempleados, el 9,9% a labores del hogar, el 5% estudiantes mayores de 16 años, de cada 100 asalariados de la comunidad, 25 son públicos, frente a los 20 de media nacional. En Burgos el 22% de los asalariados trabajan para la administración El porcentaje de la población de Castilla y León que está empleada por alguna de las tres Administraciones (central, autonómica y local), se sitúa en el 7,54%, en Burgos los funcionarios constituyen el 7,5% del total de la población; 23.092 personas.
De los 939.200 castellanos y leoneses en edad de trabajar y con empleo, 546.200 son asalariados del sector privado y 204.500 se encuadran en las categorías de autónomos, empresarios sin trabajadores y empleados, según el INE
Desde la formación castellanista se critica al PP y al PSOE regionales por querer periódicamente «hacerse una foto» con el tema de la despoblación, mientras se muestran incapaces de adoptar políticas adecuadas contra esta lacra que afecta al medio rural castellano.
El Pacto de la Despoblación de 2005, o la Agenda de la Despoblación de 2010-2011, que, si creemos al Gobierno Autonómico, fue dotada con 950 millones de Euros, son algunos ejemplos de medidas que por inconcretas, y por falta de compromiso se han mostrado totalmente ineficaces, valga como ejemplo que en el intervalo de dos años de aplicación de la Agenda de Despoblación, la Comunidad perdió 15.865 habitantes.
Se han abandonado más de cuatrocientos pueblos en Castilla y León, se han cerrado más de 2.000 escuelas rurales, la mitad de sus comarcas tienen densidades de población inferior a 10 habitantes/kilómetro cuadrado, y somos el territorio más envejecido de toda Europa.
La formación considera necesario desarrollar un Programa de Implantación de Industrias y Empresas en las cabeceras comarcales, que apueste especialmente por la transformación de las materias primas propias (agropecuarias, forestales, etc…), con la implantación de las nuevas tecnologías, y abogar por la comarcalización como forma de vertebración territorial de la Comunidad.
40.000 jóvenes ,según datos oficiales, han emigrado desde Castilla y León en los últimos 10 años, la cifra es aún más acusada pues muchos jóvenes siguen censados en la Comunidad, pese a residir y trabajar fuera de Castilla y León. Hay más jóvenes formados en las cuatro Universidades de Castilla y León, trabajando en Madrid que en la propia Comunidad, es lamentable, así es imposible salir del vagón de cola de las autonomías más envejecidas, y con peores tasas de natalidad.
Económicamente Burgos debe apostar por un desarrollo sostenible, que fije la población frenando la emigración de los jóvenes, y generando actividad en los ámbitos del medio ambiente, las nuevas tecnologías y la transformación de los recursos de la provincia. El PARTIDO CASTELLANO (PCAS) reclama medidas específicas, haciendo hincapié en la vertebración del territorio, «para afrontar la sangría que supone la despoblación para la Comunidad de Castilla y León».
Para ello es necesario que el desarrollo de las infraestructuras y las comunicaciones avancen en el territorio castellano, uniendo nuestra economía a la de los principales centros neurálgicos de España y Europa y evitando que las comarcas más atrasadas o aisladas queden desvinculadas de estos procesos.
Desde un punto de vista social, Burgos necesita profundizar en aquellas actuaciones que frenen la exclusión social, que permitan la integración de las nuevas aportaciones inmigratorias, y que extiendan a todas las capas de la sociedad la prestación, pública y de calidad, de unos servicios sociales, educativos, sanitarios, culturales, etc., que cohesionen todos los sectores sociales de nuestra provincia.
En el ámbito de la cultura, Burgos debe apostar por una defensa rabiosa de su patrimonio etnográfico y de cultura tradicional, hoy claramente amenazado a pesar de constituir un elemento clave para entender la cultura europea de los últimos mil años. Es imprescindible potenciar los programas transversales, de cooperación educativa y cultural, entre las diferentes provincias de Castilla y León y las comunidades castellanas de Rioja y Cantabria.
Medidas inmediatas:
– Potenciar los recursos para dotar de servicios de calidad a la educación, sanidad y servicios sociales.
– Aumento de la bajas de maternidad o paternidad a 18 semanas como recomienda la OIT. Tendría un coste en Castilla y León de unos 15.000.000 de Euros.
– Ayudas a los nuevos nacimientos, según renta hasta los diez años. Sólo el Presupuestos de las Cortes es de 27 millones, con partidas prescindibles como: seguro de vida para los Procuradores, Plan de pensiones, pago de seguro para sus vehículos particulares, pago de kilometrajes etc.., cada Procurador “raso” del PP gana unos 3.000 euros mensuales, en tanto que los del PSOE no salen por menos de los 2.000.
– Descentralización de la Junta de Castilla y León, y de las empresas públicas que dependen de ésta. 18.000 funcionarios pertenecen a la “Administración General” toda ellas en Valladolid excepto 73 empleados de la Dirección General de Minas que están en León.
– Crear una Facultad de Medicina en Burgos con un retorno económico anual estimado en 50 millones de euros.
- Convertir a Burgos en un referente mundial en el estudio de nuestra Lengua, “Burgos Capital del Castellano” con un retorno anual aproximado de 125 millones de euros.
Medio Plazo:
– Valorizar el patrimonio histórico, artístico, cultural y medioambiental como ejes vertebradores de identidad y de nuevos yacimientos de empleo.
– Mejora de la calidad de vida en nuestros pueblos y ciudades (sanidad, educación, servicios sociales, transportes, nuevas tecnologías,…).
– Extensión de los hábitos democráticos, convirtiendo a la sociedad burgalesa en un ejemplo de participación.
Medio rural
Burgos pierde 40 profesionales agrarios en 2014, la tercera provincia de Castilla y León en reducción, tras León y Zamora.
– Refundación de la Diputación Provincial: los castellanistas burgaleses reclaman una auténtica refundación de la Diputación Provincial, para que sus recursos económicos lleguen íntegramente a los pueblos de menos de 20.000 habitantes. Gasta más del 65% de sus presupuestos en acciones ajenas a los pueblos y menos de la tercera parte de sus recursos llega como inversiones o subvenciones directas a los municipios de la provincia.
– Modelos de ordenación del territorio avanzados, construidos sobre las comarcas y mancomunidades.
– Acuerdos con empresas para descentralizar servicios, con beneficios fiscales para aquellas empresas que se instalen en el medio rural.
– Maximizar la utilización de los recursos y materias primas de la provincia orientándolos a un desarrollo económico endógeno.
– Acuerdos con empresas para descentralizar servicios, con beneficios fiscales para aquellas empresas que se instalen en el medio rural.
– Política de traspaso de explotaciones: facilitar y auspiciar el traspaso de explotaciones agrarias y ganaderas, en la actualidad cuando un agricultor o ganadero se jubila en la mayor parte de los casos su explotación desaparece.
– Teletrabajo: incentivos a las empresas que utilicen esta modalidad con empleados en el mundo rural.
– Búsqueda de actividades innovadoras: desarrollo de las energías alternativas, sin agredir al paisaje y variantes de las actividades tradicionales como la agricultura ecológica.
– Nuevos Yacimientos de Empleo: la actual situación de envejecimiento ayuda a la creación nuevos servicios como ayuda a domicilio a ancianos, asistencia doméstica o empresas de limpieza. Incluso el desarrollo de guarderías para cuidar de los hijos de los empleados en los nuevos yacimientos.
– Impulsar medidas fiscales y financieras de apoyo no sólo en el marco de la política de vivienda protegida sino en el marco más amplio de fomento de la repoblación, instalación de nuevos emprendedores y apoyo a los jóvenes.
– Infraestructuras: para un desarrollo adecuado es necesario contar con una red de vías de comunicación óptimas, principalmente por carretera, pero sin descartar el ferrocarril, para transporte de personas y mercancías. Incluso aéreas para la recepción de turistas.
– Unir esfuerzos: que las políticas de las diferentes administraciones implicadas se coordinen Unión Europea, Gobierno de España, Junta de Castilla y León, Ayuntamientos, Mancomunidades y Grupos de Acción Loca