Dentro del amplio programa los castellanistas fijan sus prioridades en la lucha contra la corrupción, incluido un código ético, como la obsesión de lograr que se frene la endémica despoblación que sufre nuestra ciudad.
La “hoja de ruta” del PARTIDO CASTELLANO-TIERRA COMUNERA (PCAS-TC) para el mandato 2015-19 pasa por la transparencia en la gestión pública, la creación de puestos de trabajo de calidad, la austeridad en el gasto público, evitando gastos superfluos e innecesarios, y la participación ciudadana.
“El programa es un contrato con la ciudadanía, que pretende buscar soluciones y aportar ideas a infinidad de problemas, carencias y penurias, que sufren los habitantes de la ciudad de Burgos”, manifestó Hernández.
Los castellanistas han incluido en su programa, desde novedosas políticas de movilidad, hasta la intención de frenar la demolición del antiguo Hospital, pasando por acciones anti-desahucios, la declaración de Burgos de la Capital de la Lengua Castellana, la creación de una Facultad de Medicina, o la firme intención de atraer empresas a nuestros polígonos industriales cediendo suelo para uso industrial.
Además de los capítulos que se repiten en este tipo de programas, el PCAS-TC propone rediseñar el organigrama municipal fusionando las concejalías actuales en sólo seis grandes áreas o concejalías.
La política animalista o un verdadero compromiso con los Derechos humanos, también tienen cabida entre las propuestas de los castellanistas.
“En conclusión, desde la participación ciudadana, hemos creado un modelo de ciudad, frente a otros partidos que sólo saben hablar de medidas alejadas de lo que la ciudadanía espera, enfrascados en tapar sus casos de corrupción, o en escuchar las frases lapidarias de sus líderes mesiánicos”.
Finalmente el candidato castellanista recordó, “que el PCAS-TC no va contra nadie, sólo vamos a buscar lo mejor para nuestros vecinos de Burgos”.