Quiero hacerle llegar mis reflexiones acerca de la mesa redonda electoral organizada por la Asociación Ciudadanos por Segovia con los tres partidos políticos que tienen representación en el Congreso de los Diputados,
Vaya por delante mi respeto y admiración por la dinamización política que ha producido en Segovia la Asociación Ciudadanos por Segovia durante los dos últimos años y que le ha dado un protagonismo que se ha ganado por méritos propios.
Vaya por delante que Ciudadanos por Segovia tiene todo el derecho del mundo a invitar a sus actividades a quién le de la gana. Por supuesto.
Sin embargo, dado que dicha mesa redonda será probablemente el acto de campaña más interesante de los que se organicen, dado que estos actos contribuyen a crear opinión sobre los temas que dirimen, y dado que además de los partidos invitados hay otros sobre los que influirá negativamente su exclusión porque no podrán hacer llegar a los segovianos sus propuestas, tenemos el derecho a hacer unas reflexiones:
El debate organizado por Ciudadanos por Segovia es un acto que sigue el esquema conocido de privilegiar a los partidos poderosos e ignorar a los partidos minoritarios con la excusa de que la democracia está reñida con los números (18 partidos se presentan en Segovia) y con las opiniones (18+X) que pudieran desbordar el marco conformista de lo políticamente correcto. ¿Alguien cree que el PP o el PSOE no tienen ya suficientes púlpitos desde donde predicar su concepto patrimonial de la democracia como si fuera un sacramento? ¿Por qué se les regala en bandeja otro púlpito más del que se excomulga a los partidos pequeños? ¿Dónde está la ética o la estética de apartar de un debate de interés público a los partidos minoritarios sólo por el hecho de serlo? ¿Acaso ha llegado ya aquello de que todos somos iguales pero algunos son más iguales que otros, que acuñó Orwell en Rebelión en la granja?
El debate celebrado el 2 de marzo ha constituido una múltiple decepción:
Primero porque en su preparación se ha ignorado y ninguneado- a los partidos minoritarios que con toda legitimidad pretenden hacerse oír. Ciudadanos por Segovia ha demostrado que no anda sobrada de transparencia en sus invitaciones y ha seguido la rancia inercia del nacionalismo tradicionalista español que considera que lo único importante es lo que pasa en el Congreso de los Diputados de Madrid. Pero lo que se ventila en las próximas elecciones generales es la situación actual de la provincia de Segovia: se van a elegir 3 diputados y hay nuevos candidatos con ideas y propuestas diferentes a las que llevaron a los actuales a su escaño (2 del PP y 1 del PSOE). Creemos que esa perspectiva hacia el futuro es el punto de partida para un debate que se pretende transformador. De ningún modo hacernos rehenes del pasado.
Segundo porque se ha privado a los segovianos de la capital y de la provincia de escuchar opiniones, propuestas e ideas distintas de las que llevan oyendo meses predicadas como verdades absolutas y únicas por los dos grandes partidos. Creemos que Ciudadanos por Segovia se ha impuesto una convocatoria sesgada hacia lo ya conocido (las viejas recetas y fábulas de los que han caciqueado Segovia en los últimos 50 años y que la han convertido en una provincia poco halagüeña, especialmente si eres joven) y ha evitado entrar en el más arriesgado intercambio de opiniones con otros partidos y otras fuerzas que hemos demostrado ser constitucionalistas, en la letra y en el espíritu, con tanto o más rigor -y desde luego con menos manchas y decepciones- que los partidos que debatieron en la mesa redonda. Es curioso que algunos medios de comunicación privados están demostrando más apertura de miras y más tolerancia en su producción mediática que algunos foros supuestamente independientes.
Tercero porque la convocatoria pone en evidencia una prevención por los partidos minoritarios que no casa bien con algunas de las propuestas tradicionales de Ciudadanos por Segovia: Respeto a las Minorías, Contraste de Opiniones y favorecer la Pluralidad.
Independientemente de las anteriores consideraciones el debate en sí ha sido decepcionante también porque creemos que no se han tratado temas básicos que afectan directamente a los ciudadanos de la provincia de Segovia. Sin afán de ser exhaustivos creemos que deberían haber estado sobre la mesa temas fundamentales de una campaña electoral como son: La Despoblación rural y propuestas para fijar población; la Discriminación efectiva de los ciudadanos especialmente si habita en los barrios incorporados a Segovia y en los pueblos de de la provincia; la Gestión del Agua y la Gestión de los Residuos urbanos y agropecuarios; la erosión democrática que está sufriendo España (Ej. Ley contra Ibarretxe y contra cualquiera); las consecuencias de la Nueva Reforma de los Fondos Europeos a partir del 2007; el Sistema de Financiación de las comunidades autónomas.
Finalmente la mesa redonda ha constituido una decepción en otro sentido, éste más previsible y no achacable a Ciudadanos por Segovia: Los representantes de los tres partidos invitados no han repetido más que balbuceos y generalidades que llevamos oyendo meses pero que ni abren nuevas perspectivas para los problemas realmente graves; ni siquiera consuelan a los ciudadanos de la provincia de Segovia que han aprendido que hasta la próxima campaña electoral las soluciones volverán a su letargo habitual de los despachos y las buenas intenciones. Por otro lado es muy fácil y barato hacer promesas pero cumplirlas es otro cantar y ¿quién les va a recordar a los diputados por Segovia las promesas que están haciendo hoy, que es la época a fin de cuentas, cuando se acomoden en el Congreso? Probablemente sólo los partidos que vivimos a pie de calle y compartimos las inquietudes y aspiraciones de los ciudadanos porque somos parte de ellos. Apuesto a que sólo algunos partidos minoritarios que no fuimos invitados a esta mesa redonda marcada.
Mariano Fuente, Candidato de Tierra Comunera al Congreso de los Diputados.