Como colofón a las actividades desarrolladas por la Concejalía de Acción Social en la Semana del Menor, la psicóloga Rocío Ramos impartía una conferencia sobre la educación de los hijos, aportando claves y sugerencias para facilitar un crecimiento saludable para los menores. Algunas de las pautas más repetidas en su disertación se basaban en el equilibrio entre los castigos, cuando la situación lo requiera, y las demostraciones de afecto o aprobación, cuando se produzca un comportamiento adecuado.
Una de las ideas que quiso dejar claras Rocío Ramos era la aportación de alternativas a los menores para lograr que cumplan una obligación. «No podemos decirles sólo que tienen que recoger su habitación, hay que decirles que cuando recojan sus habitación podrán jugar, o que jugaremos con ellos o que podrán ver los dibujos», afirmaba Ramos, que lograba un gran poder de convocatoria gracias a la popularidad alcanzada por el espacio Super Nanny, que conduce en Cuatro.
El fin de estas posiciones de los adultos es que los niños se sientan queridos y no obligados a realizar algo que a ellos les cuesta. «Tener en cuenta que si se comen un guisante, aunque haya un plato entero, para ellos ya es un gran paso», reforzaba la psicóloga. En cuanto a los casos de violencia, Ramos abogaba por potenciar la capacidad de reírse de unos mismos y no atender a las provocaciones. «Si un niño le llama gafotas, puede decirle que con cuatro ojos ve más que dos y darse la vuelta, con lo que el agresor entenderá que ahí no tiene caldo de cultivo para sus insultos», afirmaba Ramos.