TIERRA COMUNERA (TC) ante la próxima celebración en 2005 del IV Centenario de la primera publicación de la novela cervantina El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha, quiere manifestar ante la opinión pública castellana la urgencia, ante este acontecimiento, de potenciar las señas culturales propias de la identidad de toda Castilla, al tiempo que denuncia la instrumentalización partidista de este significativo hecho cultural, por parte de los partidos PP y PSOE, al frente de las distintas administraciones públicas, buscando un mero protagonismo político por encima de potenciar los aspectos culturales y literarios castellanos que este acontecimiento exige en el ámbito territorial de las diferentes Comunidades Autónomas Castellanas.
Desde este partido político consideramos que se ha dejado escapar una ocasión de oro para aunar esfuerzos entre las distintas administraciones públicas y celebrar un auténtico Año del Quijote y Cervantes, verdadero año de la Cultura de raíz Castellana, en vez de la lucha que están llevando a cabo las distintas administraciones públicas por manipular e instrumentalizar con criterios partidistas esta conmemoración. Es triste ver cómo la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha se muestra incapaz de colaborar con la Junta de Castilla y León o con la Comunidad de Madrid en la celebración de este Centenario, cuando tanto Valladolid como Toledo, o La Mancha como Alcalá de Henares son lugares imprescindibles en la geografía cervantina. No se entiende a Cervantes sin Alcalá de Henares ni al Quijote sin Valladolid, pero nuestros representantes públicos sólo han entendido que sus Comunidades Autónomas inventadas deben ser más importantes que las demás y ser más quijotescas que el resto.
En el caso de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha llama la atención cómo se pretende hacer de El Quijote un hecho diferencial respecto al resto de Comunidades Autónomas castellanas, cuando no es sino un medio de integración de todas las comunidades autónomas de Castilla entre sí. Es inaudito cómo se puede trazar una Ruta del Quijote (en la que se han invertido millones de euros de los fondos públicos) que no pase por Alcalá de Henares sólo porque Alcalá pertenece a la comunidad de Madrid, o como excluye a localidades como Valladolid, donde se ubica la única Casa habitada por Cervantes que se mantiene. Es inaudito igualmente que la Consejería de Educación de Castilla-La Mancha, pretenda, con la excusa de la celebración de este Centenario estimular el conocimiento de los elementos que configuran la identidad castellano-manchega (¿es que existe una identidad castellano-manchega distinta de la identidad castellana?). Según esta Consejería, se pretende que la lectura guiada del Quijote proporciona al alumnado un conocimiento y un acercamiento en profundidad a la realidad humana, política, económica y cultural de una época, y a una tierra, unas gentes, un modo de vivir y un lenguaje que hacen que Castilla-La Mancha tenga una proyección universal, algo especialmente ridículo si se tiene en cuenta que, en el S. XVII, Castilla-La Mancha no existía, limitándose la historia de esta entidad administrativa a poco más de veinticinco años. Es bochornoso que se intente manipular a los estudiantes de Castilla-La Mancha con estas mentiras y medias verdades.
Y en el caso de la Junta de Castilla y León, de los gobernantes de la Comunidad de Madrid, sus responsables centran todos sus esfuerzos en demostrar que pueden apropiarse de Cervantes y de la lengua castellana, intentando diferenciar a Cervantes de su obra y al castellano de los autores que políticamente no les interesan.
Desde TIERRA COMUNERA (TC) instamos a todas las administraciones y entidades públicas con alguna responsabilidad en la Celebración del IV Centenario de la Primera Edición del Quijote a que aúnen esfuerzos, se sienten en una mesa de negociación y establezcan un calendario único de celebración de esta efeméride; a que colaboren en una única empresa pública para su celebración; a que racionalicen los gastos que estos actos acarrean y que recuerden que las Comunidades Autónomas castellanas actuales son un invento que fracciona artificialmente Castilla, pero que existen cauces de colaboración entre ellas que deben explorarse y potenciarse (como el Consejo de las Comunidades de Castilla, que lleva más de seis años sin reunirse y que podría ser un magnífico cauce de colaboración y de coordinación inter-castellano) en beneficio de todos los castellanos; así como que esta colaboración debe ser extensiva a cualquier acto o efeméride que se celebre en toda Castilla, como puede ser la actual celebración del V Centenario de la muerte de la Reina Isabel I de Castilla.