El regidor socialista, Julián Martínez, se enfrenta el jueves, con solo el apoyo de su hermano y compañero de filas, a la sesión plenaria en la que se decidirá si sigue al frente del Consistorio
La pequeña localidad de Ciruelos de Cervera podría cambiar de alcalde a menos de un año para las elecciones municipales -cuya celebración está prevista para el próximo 27 de mayo- si prospera la moción de censura presentada por las dos representantes de Tierra Comunera en el Consistorio, que cuentan con el sorprendente apoyo de uno de los integrantes del equipo de gobierno, el socialista Ángel Fernández.
Tal y como marca la ley, quince días después de que se hubiera formalizado esta medida política, el pleno del Ayuntamiento celebrará este mismo jueves, 27 de julio, la sesión en la que se debatirá el cese o la continuidad del controvertido regidor Julián Martínez, elegido bajo las siglas del PSOE, al frente del Consistorio de Ciruelos de Cervera.
Tras este golpe de mano parece que se encuentran más motivos personales y contrarios a la actitud del primer edil que razones políticas. Al parecer, los promotores de la moción de censura acusan al alcalde de guiar el Consistorio con una actitud excesivamente personalista. A su supuesta escasa predisposición al diálogo podría unirse el hecho de que Julián Martínez no reside habitualmente en el municipio que encabeza sino que solo acude a él durante los fines de semana, lo que dificulta aún más la discusión de los temas.
Fuentes cercanas a los impulsores del golpe de mano aseguraron que en los últimos tiempos fueron varias las ocasiones en que el propio alcalde apremió a los ediles de la oposición a que interpusieran contra él una moción de censura si no estaban de acuerdo con alguna de las decisiones que había tomado.
Asimismo, y también como ejemplo del comportamiento individualista de Julián Martínez, explicaron que ha destituido en varias ocasiones a las personas que detentaban el cargo de tesorero hasta que, en la última ocasión, ha decidido que fuese su propio hermano y compañero de filas en el Consistorio, Guillermo Martínez, el que ocupase el puesto.
A todo ello podría haberse sumado el escaso apoyo recibido en las urnas por el regidor. De los 141 votantes que tiene censados el municipio, solo se emitieron 85 votos válidos y de ellos hubo que descontar 23 que se emitieron en blanco. Esto se traduce en que las dos formaciones que obtuvieron representación en el Consistorio, TC y PSOE, se repartieron poco más del 40% de las papeletas.
Diario de Burgos intentó durante los últimos días ponerse en contacto con los protagonistas de esta noticia, tanto con los promotores de la moción de censura, como con el alcalde de Ciruelos, para conocer con más detalle los hechos, sin que haya sido posible.
Tierra Comunera respalda a sus ediles
Las dos representantes que Tierra Comunera tiene en la Corporación de Ciruelos de Cervera llevan en buena medida la mayor parte del peso específico de la moción de censura que se debatirá este jueves en la Casa Consistorial del municipio. En la decisión de dar este golpe de mano cuentan con el respaldo incondicional de la formación política que representan. Así al menos lo confirma el secretario provincial del partido castellanista, José Ignacio Delgado, quien reconoce que aunque no es el momento idóneo para poner en marcha la maquinaria política para reemplazar al actual regidor, dado lo avanzado del mandato y el poco tiempo que queda para la próxima cita con las urnas -el jueves faltarán justo 10 meses para los comicios municipales- aseguró el apoyo total a sus ediles.
Delgado recuerda que uno de los principios básicos de Tierra Comunera es la no ingerencia de los partidos políticos en las decisiones de la vida municipal en la que cuenten con representación. De hecho, advierte, se considera que son los concejales con los conocimientos obtenidos en el día a día de la vida municipal, las más capacitadas para decidir cuál es el momento idóneo para llevar a cabo la moción.