El PARTIDO CASTELLANO (PCAS) muestra su satisfacción ante el cierre definitivo de la central nuclear de Santa María de Garoña (Burgos), según ha anunciado hace unos minutos el Ministro de Energía.
“Resultaba inadmisible que se pudiera apostar por la reapertura de Garoña, algo que hubiese causado un gravísimo daño a la seguridad nuclear, si finalmente se hubiese aprobado la autorización de reapertura. Garoña es una central obsoleta, además hoy existe, en España, más potencia instalada de la que habitualmente se utiliza”, manifestaron los responsables del PARTIDO CASTELLANO (PCAS).
El PARTIDO CASTELLANO (PCAS) venía reclamando desde hace años un mayor esfuerzo presupuestario así como un compromiso real, activo y directo en la creación de empleo y de actividad económica en las Comarcas del norte de Burgos, siendo imprescindibles proyectos como el Plan Reindus y otras alternativas de creación de empleo y dinamización económica que compensen, el ya confirmado, cierre de la Central que “tenía que llegar tarde o temprano”.
A juicio de los castellanistas, “Garoña representa el pasado, es una de las instalaciones nucleares más viejas de Europa, idéntica a la unidad 1 de Fukushima, causante de uno de los peores accidentes nucleares de la Historia y suponía sólo una producción inferior al 1,2% del sistema eléctrico español, además la energía nuclear no garantiza la dependencia energética de España pues el 100% del combustible de uranio que utilizaba Garoña y las demás centrales nucleares instaladas en España procede del extranjero”.
El PARTIDO CASTELLANO (PCAS) recuerda la negativa de Endesa e Iberdrola a solicitar la renovación de la licencia de la Central Nuclear de Garona en 2012, considera que estas empresas engañaron a la opinión pública en su solicitud de futuro para la energía nuclear, la lucha contra el cambio climático y la defensa de los puestos de trabajo en la comarca, y que su único interés era de lucro económico. Para el PARTIDO CASTELLANO (PCAS) que la central nuclear de Santa Maria de Garoña cierre, es una buena noticia, que se completará cuando venga acompañada de inversiones para reactivar la economía de la zona cuya única industria ha sido una central nuclear obsoleta, anticuada, amortizada e insegura, que hubiese necesitado ingentes inversiones para continuar con su actividad.
La instalación nuclear ha frenado durante años el desarrollo de otros sectores económicos en la comarca, como son la modernización y mejora de la rentabilidad de las empresas del sector agropecuario centradas en los productos de calidad, la creación de industrias en los sectores de las nuevas tecnologías y las energías renovables, y la potenciación de un sector turístico de primer nivel, que utilice como vectores el extraordinario Patrimonio Cultural y Natural de las comarcas del norte de Burgos.